Cuando se trata de dolor de cuello, muchos pacientes buscan atención quiropráctica. De hecho, existen varios estudios que demuestran que las terapias manuales realizadas por médicos quiroprácticos pueden ofrecer importantes beneficios para el dolor de cuello mecánico o inespecífico, así como el dolor de cuello derivado de lesiones relacionadas con el deporte, accidentes automovilísticos y caídas. ¿Cuáles son algunas de estas terapias manuales?
La terapia de manipulación espinal (TME) consiste en mover la cabeza y el cuello a un rango final firme de movimiento seguido de un impulso rápido dirigido a articulaciones específicas que están fijas, subluxadas (parcialmente fuera de posición) y sensibles. El empuje se describe como un movimiento de "alta velocidad, baja amplitud" (HVLA, por sus siglas en inglés) también llamado "un ajuste", que es más exclusivo de la profesión quiropráctica. La cavitación de la articulación (el sonido de "crujido") a menudo ocurre cuando el gas (nitrógeno, oxígeno, dióxido de carbono) se forma dentro o se libera de la articulación.
La movilización espinal (MS, por sus siglas en inglés) es un movimiento de baja velocidad y baja amplitud que suele ser lento y rítmico, que aumenta gradualmente la profundidad de un movimiento de ida y vuelta, a menudo combinado con tracción manual. Aquí, la cavitación articular es menos común.
El entrenamiento con ejercicios que se enfoca en fortalecer los músculos flexores profundos del cuello y otros ejercicios que están diseñados específicamente para cada paciente individual en función de sus necesidades específicas pueden dar como resultado mejores resultados del tratamiento en comparación con un programa de ejercicio generalizado no específico. Los estudios en los que se combinan TME/MS y ejercicio informan mejores resultados a largo plazo que TME/MS solo, pero TME/MS generalmente supera a solo la terapia de ejercicio.
Las modalidades de fisioterapia (PTM, por sus siglas en inglés) pueden incluir ultrasonido, interferencial, bajo y alto voltaje, corriente galvánica, diatermia, láseres (clase 3B y IV principalmente), ultravioleta, iontoforesis y fonoforesis, pulso electromagnético, calor/frío, y más.
Las técnicas de liberación muscular (MRT, por sus siglas en inglés) incluyen terapia de masaje, liberación miofascial, terapia de puntos gatillo, técnicas de energía muscular, terapia de liberación activa, gua sha y muchas más.
Los dispositivos de tracción cervical se pueden utilizar en el consultorio o en el hogar, según las necesidades del paciente; sin embargo, es común que se utilicen ambos enfoques. Los beneficios obvios de la tracción en el hogar incluyen la capacidad de repetir su uso varias veces al día y, en general, es más rentable. Los tipos incluyen la tracción estática que se puede aplicar sentado o en decúbito supino (en la espalda) y la tracción intermitente, que generalmente se realiza en decúbito supino y está computarizada y, por lo tanto, a menudo se limita solo al uso en el consultorio.
Los enfoques utilizados en el transcurso de los cuidados dependen de la preferencia del paciente y del quiropráctico tratante. Es importante discutir sus preferencias con su quiropráctico cuando busque atención.