Cuando las personas piensan en la quiropráctica, inmediatamente piensan en el dolor lumbar, y a menudo se sorprenden al descubrir que la quiropráctica puede ser beneficiosa para muchas afecciones, como el síndrome del túnel carpiano, el codo de tenista, dolores de cabeza, desgarros del manguito rotador, así como también condiciones de cadera, rodilla y tobillo. También existe apoyo investigativo para la manipulación (un componente clave de la quiropráctica) y su papel en el manejo de afecciones "viscerosomáticas" relacionadas, como neumonía, mareos, hipertensión en etapa 1, síndrome premenstrual, asma, cólicos y enuresis.
La investigación muestra claramente que la manipulación quiropráctica supera a otras formas de tratamiento para el dolor lumbar agudo, subagudo y crónico. Pero, la pregunta sigue siendo, ¿Puede la "quiropráctica preventiva" PREVENIR problemas en el futuro? En agosto de 2011, dos médicos publicaron un artículo en una importante revista médica (SPINE) titulado: "¿La terapia de manipulación espinal preventiva para el dolor lumbar crónico inespecífico ofrece mejores resultados a largo plazo?".
El objetivo del estudio era determinar si el tratamiento de pacientes con dolor lumbar crónico (dolor >seis meses) después de un curso de doce tratamientos en el primer mes, funcionaría mejor, igual o peor que si los tratamientos se continuaran a intervalos de dos semanas durante un período adicional de nueve meses. Compararon tres grupos de pacientes:
- Doce tratamientos de manipulación "simulada" (placebo) durante un período de un mes.
- Doce tratamientos de terapia de manipulación espinal (TME) "real" durante un mes, pero ningún tratamiento durante los nueve meses siguientes.
- Lo mismo que el # 2 pero con tratamientos cada dos semanas, durante los próximos nueve meses.
Para determinar las diferencias entre estos tres grupos, los autores midieron las puntuaciones de dolor y discapacidad (mediante cuestionarios), el estado de salud genérico (cuestionario) y la satisfacción del paciente en cuanto a su espalda específicamente (cuestionario) en intervalos de 1, 4, 7 y 10 meses.
Los resultados mostraron que los grupos 2 (TME durante un mes solamente) y 3 (TME durante un mes + cada dos semanas durante nueve meses) tenían puntuaciones de dolor y discapacidad significativamente más bajas que el primer grupo (grupo simulado/placebo) al final del 1er mes o 12 de visitas. Sin embargo, solo el grupo 3 (en el que los tratamientos se continuaron durante nueve meses a intervalos de dos semanas) mostró mayor mejoría en las puntuaciones de dolor y discapacidad a los diez meses. Igualmente importante, las puntuaciones de los pacientes del grupo 2, tratamiento no-mantenido, ¡Volvieron a estar cerca de sus niveles previos al comienzo del tratamiento en el mes 10!
Los autores concluyeron que la terapia de manipulación espinal no solo es eficaz para el dolor lumbar crónico, sino que, lo que es más importante, se necesitan AJUSTES REGULARES CADA DOS SEMANAS después del curso inicial de atención concentrada (3 veces por semana durante 4 semanas), "... para obtener beneficio a largo plazo", lo que sugiere que, "... la continuidad de TME después de la terapia de manipulación intensiva inicial", es el cuidado apropiado para obtener resultados a largo plazo.
¡Este estudio FINALMENTE apoya las recomendaciones hechas por los quiroprácticos durante muchos años, de que los ajustes regulares son beneficiosos para obtener una mejor calidad de vida, menos dolor y menos discapacidad!